China es una de las 5 economías más importante del mundo. Es la mayor economía exportadora del mundo y el segundo importador de bienes y servicios. Su economía ha crecido en un promedio de entre 9,5 y 10% en los últimos 10 años y que a pesar de una leve ralentización este año, se ha mantenido en el promedio. A pesar de estos números, la distribución de la riqueza es desigual, en el interior del país la pobreza es evidente. Para paliar un poco esta desigualdad, el actual gobierno chino ha utilizado varios mecanismos de subsidios, cuyo financiamiento principalmente se origina de las exportaciones que realizan. Esa es una de las claves para explicar el por qué el gobierno chino debe mantener el nivel acelerado de crecimiento.
En ese marco y aprovechando la cercanía ideológica que existe con el Partido Comunista Chino y utilizando como argumento estratégico el planteamiento de un mundo multipolar que haga contrapeso a las potencias imperiales, el gobierno del presidente Chávez ha establecido una relación comercial muy privilegiada que ha dado, entre otros resultados el crecimiento entre U$ 10, 000 y 12,000 millones desde 1999 hasta principios de 2012. El más controversial de los acuerdos es el Fondo Chino – Venezolano cuyo objetivo es financiar con dinero chino, proyectos en Venezuela. Es un préstamo que nos hace China a largo plazo. Los pagos de capital e intereses lo hace el estado venezolano con petróleo.
Obviamente al gobierno chino le interesa que le paguen con petróleo ya que como explicamos anteriormente para poder mantenerse como el país líder de las exportaciones a nivel necesita de materias primas y combustible. Ese combustible se lo puede suministrar Venezuela a precios más económicos y además garantiza un aliado más para el suministro en la misma región que su principal competidor: EEUU. Ahora, ¿Venezuela se beneficia con todo esto? Ideológicamente hablando, es coherente con los principios revolucionarios porque rompe la dependencia de importaciones de otros países y además se endeuda con China que tiene la necesidad de colocar sus capitales en otros países pero a cambio de petróleo. Este es el riego que se corre, el petróleo financia a largo plazo la amortización a esa deuda lo que compromete el patrimonio de futuras generaciones. El gobierno de Chávez criticaba tanto el endeudamiento con el FMI, pero está haciendo lo mismo con China, entonces ¿cuál es la diferencia entre endeudarse con imperio Norteamérica y ahora con otro, el naciente imperio chino? ¿Es una necesidad ideológica o estratégica? Mientras eso ocurre, el interés chino sigue creciendo.
