Cuando un corte de cabello no vale más que figurar en Naciones Unidas por Adriana Boersner - Runrun


El gobierno de Venezuela tiene en su agenda tres temas que patrocinar en la plenaria de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, los cuales son relevantes en los momentos actuales por los que atraviesa el sistema internacional, pero discordantes, si evaluamos el tipo de petición y actuación-respuesta que ha tenido el gobierno ante procesos que atañen propiamente a Venezuela.

1.- Refundación de la Organización.

Venezuela propone la necesidad de que esta organización avance hacia un proceso que vaya acorde a los nuevos tiempos y a un mundo multipolar, en donde la DEMOCRACIA sea el valor que rija las discusiones, toma de decisiones y estructura del organismo.

Aquí cabría preguntarse: ¿Qué entiende el gobierno de Venezuela por democracia?, concepto clave no sólo para el sistema de Naciones Unidas, sino también, para la propia Venezuela, y si es cierto que estamos en un mundo multipolar, ¿por qué la cada vez menor relación con países y esquemas de integración que simplemente no están alineados con la ideología del gobierno de Venezuela? ¿Qué entenderá el gobierno venezolano por multipolaridad?

2.- Crisis en Libia.

El gobierno de Hugo Chávez ha insistido desde el comienzo de las manifestaciones en Libia, el cese de la intervención de países aliados en los asuntos internos del país magrebí, y los posteriores bombardeos por parte de la OTAN contra el pueblo de Libia, defendiendo hasta el último momento las políticas y actuaciones de un líder, Muamar Gadafi, que ha perdido legitimidad tanto en su país como en el ámbito internacional.

En la crisis en Libia tan malo ha sido el bombardeo por parte de la OTAN, como la falta de humanidad que ha tenido el propio Gadafi en perseguir a sus opositores hasta la muerte. Pedir a sus acólitos que acaben con las “ratas” opositoras dice demasiado de un liderazgo que se autoproclamaba como democrático.

3.- Reconocimiento de un Estado Palestino.

Los palestinos y su presidente han pedido ser miembros con pleno derecho, reconociéndoles como Estado según las fronteras de 1967. De ser aprobado, Palestina sería el país número 194 en la Organización de Naciones Unidas. Para el gobierno de los Estados Unidos, elevar esta solicitud a un esquema multilateral, entorpecería y distraería las discusiones bilaterales que se han llevado a cabo entre Palestina e Israel. Igualmente,  la Unión Europea, con la clara excepción del gobierno de España, sigue apostando por una solución constructiva que conduzca a reanudar las conversaciones, las cuales hasta el momento no han arrojado mayores avances para la causa palestina.

Venezuela ante estas proposiciones no cuenta con capital político para distinguirse en el esquema multilateral, más allá de las frases jocosas y argumentos de un presidente como Hugo Chávez. A pesar de la defensa que hacen representantes de Venezuela ante la ONU, Venezuela no es un país capaz de forjar alianzas en pro de la paz, ya que ni siquiera puede reconocerse como interlocutor válido para mediar o interceder en casos recientes como la crisis en Libia.

Venezuela en la mira

Si un corte de cabello vale más que la Corte Interamericana de Derechos Humanos o cualquier otra instancia que se pronuncie en contra del Estado Venezolano o se arrodille ante el imperialismo, ¿qué hace el gobierno de Venezuela queriendo figurar en la Asamblea General de Naciones Unidas, o ¿por qué el empeño por acceder al Consejo de Derechos Humanos?. Será que la arquitectura de instituciones paralelas que ha creado Chávez no tienen la misma capacidad para alejar al mundo del centro de poder, Washington, y fijar un frente realmente con poder desde la región latinoamericana para contrarrestar al imperialismo estadounidense?.

Venezuela está en estas semanas en el ojo internacional, no sólo por los constantes y repetitivos avisos de “avance” de la salud presidencial o las relaciones  estrechas entre Venezuela- Irán o Venezuela- Cuba, sino también, porque el próximo mes de octubre, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas emitirá un informe sobre el avance o no que ha tenido Venezuela en la protección y promoción de los derechos humanos. Esto forma parte del exámen periódico que realiza la organización a los estados.  Otro caso pendiente es la decisión que tomará el Estado venezolano ante la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos por el caso Leopoldo López, la cual ha sido desestimada por muchos voceros del gobierno pero sin decisión firme aún del Tribunal Supremo de Justicia.

Por Adriana Boersner

@aboersner