El Individuo, El Colectivo Y El Diálogo Por Tomas Horacio Hernández - Runrun

Diálogo

Las manifestaciones en las calles venezolanas despertaron a un país que se encontraba con una oposición prácticamente de brazos caídos no sólo por las recientes pérdidas en el ámbito electoral sino también por la pérdida de espacios donde el descontento pudiese ser expresado. El agotamiento del modelo chavista y sus consecuencias, tal como se mencionó la semana pasada, es probablemente la razón que tiene a millones de venezolanos muy molestos. Y cuando a esto le sumamos la crisis institucional por la cual atraviesa el país, nos damos cuenta que el gobierno está en una posición mucho más compleja y frágil de la que una vez pensamos.

Ahora bien, por más delicada que sea la posición en la cual se encuentra el gobierno, este sigue contando con un apoyo popular muy importante. El chavismo tal como lo conocemos, ha penetrado para bien o para mal todas las instituciones del país, y esto hace necesario, nos guste o no, que la oposición tienda puentes con este sector para así lograr sumar más personas a su causa.

Tomar la decisión de establecer un diálogo con un gobierno como el nuestro no es sencillo, especialmente porque en la mayoría de los casos los acuerdos no se respetan en su plenitud. Sin embargo, hay ocasiones donde los voceros adversos al gobierno, ya sean políticos, empresarios o estudiantes, deben tener en cuenta que el verdadero oyente no es la persona que está sentada en frente de ellos, sino más bien la persona que está detrás del televisor.

Para reforzar la importancia del diálogo entre actores políticos, me remito, con su permiso, a un párrafo del último artículo de Fernando Mires el cual de manera muy elocuente lo explica magistralmente. “Capriles y los suyos deberán lidiar todavía con una fracción minoritaria de la oposición la que, en sus limitaciones políticas, entiende todo diálogo como una muestra de debilidad o peor, como una capitulación frente al adversario. Sus cabezas calenturientas no pueden entender que hasta en las guerras más cruentas los enemigos mortales decretan cada cierto tiempo armisticios para dialogar entre sí. Porque lo contrario de la guerra sin armisticio (es decir, sin diálogo) es la guerra total, tal como la formulara Joseph Goebels en las postrimerías del nazismo. Y bien, si hasta la misma lógica de la guerra admite el diálogo, con mayor razón ese diálogo entre enemigos puede y deberá hacerse presente en la lógica de la lucha política, por muy aguda y antagónica que esta sea”.

Entendiendo entonces que el diálogo, aunque a muchos no les guste, es necesario, quisiera rescatar un fragmento de la intervención del presidente de Empresas Polar, el señor Lorenzo Mendoza, en la Convención de Paz que se celebró en Miraflores esta semana. Lorenzo centró su discurso en la economía, área que le compete por cierto, y fue capaz de decir en cadena nacional lo siguiente: “No nos pongan a escoger entre lo colectivo y lo individual porque eso de alguna forma no está reñido. La inventiva, la capacidad individual de cada uno de nosotros hace posible que el colectivo se beneficie cada quien jugando el rol que le corresponde”.

No es poca cosa retar ideológicamente al gobierno venezolano en cadena nacional, especialmente cuando el Estado venezolano le debe a tu empresa más de 500 millones de dólares. Mendoza fue capaz de decir lo que muchos en el país no se atreven. Defender abiertamente el progreso del individuo, las aspiraciones personales, la movilidad de las clases sociales, en fin, Lorenzo habló abiertamente de la importancia que tiene la empresa privada para Venezuela.

Lorenzo habló como empresario, como empleador, como emprendedor, como venezolano, como líder, de las cosas que sabe. Punto. Eso lo aplaudo por una razón muy sencilla, en este país las personas han desarrollado una capacidad para convertirse en toderos verdaderamente preocupante. Cualquier venezolano cree que por leerse el periódico es un politólogo y debe opinar en consecuencia. Por eso es admirable cuando alguien con muy buena preparación lidera con el ejemplo.

Ojalá las palabras de Lorenzo incentiven a muchos otros venezolanos a retar la tesis del socialismo del gobierno. Ojalá, porque de lo contrario, vendrán nuevos gobiernos pero con las mismas propuestas…

@TomasHHR