Hillary Clinton: "Seré presidenta de los que me voten y de los que no"
Hillary Clinton: «Seré presidenta de los que me voten y de los que no»

HC

Hillary Clinton no es una gran oradora. Pero durante la primera parte de su discurso de aceptación de la candidatura por el partido demócrata, bastante mujeres en el Polideportivo Wells Fargo tenían lágrimas en los ojos. Eran mujeres muy diferentes: una veinteañera con la camiseta amarilla de los voluntarios sentada en las escaleras del Polideportivo; una mujer como de 60 años, de la que uno podría imaginarse que se identifica con Clinton; una afroamericana algo más joven, que, en teoría -solo en teoría, evidentemente- pudo haberse sentido mucho más emocionada con las intervenciones de Michelle Obama, el lunes, y de su marido, Barack Obama, el miércoles.

Hillary las emocionó acaso más que por su discurso porque aquello era una cita con la Historia. En 2008, el Partido Demócrata de Estados Unidos eligió, por primera vez desde que ese país fue fundado, a una persona que no es de raza blanca como candidato a la presidencia. En 2016, ha elegido a la primera mujer con posibilidades reales de lograr ese mismo título.

Pero la emoción solo duró mientras Clinton habló de su familia, y en particular de su madre, que ha inspirado toda su carrera política. Su discurso fue, previsiblemente frío, y giró en torno al eje sobre el que los demócratas están construyendo su campaña: la unión de los estadounidenses y el optimismo -un elemento central de la identidad de ese país- frente al pesimismo y a la retórica de enfrentamiento de Trump, que está empatado con ella en las encuestas

«Trump quiere dividirnos del resto del mundo, y entre nosotros», dijo la candidata demócrata, que también declaró que «seré presidenta de los que me voten y de los que no». Igualmente dio a entender que el carácter autoritario de Trump cuestiona su capacidad para ser presidente.

Aunque Hillary logró al menos conectar con el público más de lo habitual en ella, la candidata quedó en el concurso de oratoria de la Convención Demócrata muy por detrás de Barack y Michelle Obama, Joe Biden e, incluso, de su candidato a vicepresidente, Tim Kaine. El día clave de esta Convención no fue ayer; fue anteayer, la jornada en la que Kaine y, sobre todo, Biden y Obama emocionaron a las más de 20.000 personas que han abarrotado el Palacio de los Deportes Wells Fargo.

Clinton fue presentada por su hija, Chelsea, con una intervención de índole más bien plúmbea. Aún así, el público estaba entregado de antemano, y la candidata lo aprovechó. Hillary se lanzó, totalmente en su estilo, a anunciar una lista interminable de medidas políticas que provocaron el entusiasmo de los presentes -cuando hablo de política doméstica- y educados aplausos -en los momentos en los que entró en política exterior-.