El Papa Francisco pone límites a los conservadores en el Sínodo
El Papa Francisco pone límites a los conservadores en el Sínodo

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El papa Francisco intentó tranquilizar a los conservadores al asegurarles que la doctrina católica sobre el matrimonio es firme, cuando comenzó una reunión de obispos de tres semanas para determinar cómo la Iglesia debería acoger a los homosexuales, divorciados y otros católicos en uniones “irregulares”.

El pontífice intervino después de que la primera jornada empezó con un discurso del encargado del Sínodo, el cardenal húngaro Peter Erdo, que cerró la puerta a toda iniciativa para que los católicos vueltos a casar fuera de la Iglesia puedan recibir la comunión.

Francisco dijo a los 270 cardenales y obispos que ese asunto no era el único en el temario y que la doctrina de la Iglesia no estaba en cuestión, pero también pareció contrarrestar las afirmaciones de Erdo al advertir que el único documento oficial en debate era un informe final emitido por una reunión de obispos el año pasado, en la que el tema quedó en el aire.

El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, se hizo eco de esa advertencia y aclaró que el Sínodo debate un texto de trabajo con aprobación papal, donde quedó abierta la cuestión de la comunión para los católicos vueltos a casar por civil.

Monseñor Claudio Maria Celli, que dirige la comisión de información del Sínodo, confirmó que el tema permanece abierto. “Hubo una afirmación del papa acerca de cuál es la doctrina católica sobre el matrimonio”, dijo Celli. “Pero creo que si la obra de los padres hubiese concluido con el discurso de ayer en la mañana (de Erdo), ¿entonces qué estamos haciendo aquí?”.

Entretanto y en las primeras dos rondas de intervenciones, un sector exhortó a recibir a los homosexuales como hijos e hijas de Dios sin utilizar términos compasivos y a favor de un lenguaje incluyente.

Un bebé en el Sínodo.

Davide

 

Davide es un niño de tres meses y hasta el momento ha acaparado la mayor parte de la atención del Sínodo incluso de los obispos, que no dudan en tomarse fotos con el pequeño. Sus padres son italianos, Patrizia Calabrese y Massimo Paloni, y forman parte de las 18 parejas de auditores y expertos invitados para contar su experiencia. Viven en Holanda y tienen otros 11 hijos.

Las fotos de Davide en brazos de su madre con su chupón para calmarlo han dado la vuelta al mundo, ya que nunca se había visto un bebé en el aula del Sínodo cuando se celebra la solemne asamblea de los obispos.