Ayer en la tarde el presidente, Nicolás Maduro, dio inicio a la Conferencia Económica de Paz, en la que, entre otros anuncios, informó que se liquidará 30% de divisas a sectores priorizados para importaciones, los precios justos se establecerán vía web, un acuerdo con ensambladoras para fijar precios de carros y facilitar acceso a divisas y la apertura del fondo chino, Fonden y el fondo Mercosur y Alba.

A continuación un resumen más detallado de la Conferencia:

El presidente sostiene que la convocatoria a la conferencia económica de paz fue hecha porque «no podíamos dejarnos arrastrar por la locura de la violencia (…) y el rechazo mutuo». Maduro, además, elogió la presencia del presidente de Fedecámaras, Jorge Roig.

El jefe de Estado criticó la falsa dicotomía que, según él, se ha querido imponer, de diálogo o guerra. «La opción es diálogo o diálogo. Instrumentos del diálogo siempre existirán muchos. La conferencia de paz nacional, las conferencias de paz estatales u otros instrumentos que creemos hoy (…) son instrumentos de una norma central que debemos tener, que es el diálogo (…). Es una norma central, debemos tenerla. Esta sociedad si se asume como democrática (…), tiene que tener como elemento el diálogo, el debate permanente sobre todos los temas. Así que no caigamos en el falso dilema de que o el diálogo da resultados o vamos a ver qué hacemos. El diálogo ya es un resultado positivo».

Reiteró que la conferencia económica de paz era «una oportunidad de oro para ponernos de acuerdo en el campo de la economía (…). Yo lo veo así. Así lo concibo. Y el desarrollo económico de nuestro país, de un nuevo modelo productivo, solo surgirá de la unión de los esfuerzos nacionales para impulsar el desarrollo, el crecimiento y la expresión de las fuerzas productivas de nuestra patria»

Maduro añadió que la presente conferencia «nos va a permitir dar un nuevo y gran salto económico de todas las fuerzas productivas del país y a eso es a lo que yo he venido aquí hoy». Pidió a los empresarios del país que se incorporen a esa llamada nueva ofensiva económica y agregó que «es más completa» que la hecha en noviembre pasado.

Recalcó que con la nueva ofensiva económica «podemos nosotros organizar un nuevo escenario, una nueva situación económica para Venezuela. Es una exigencia nacional, es una exigencia de todo el país (…). Yo creo que Venezuela ha acumulado el conocimiento, la capacidad (…), el músculo; y la crisis que estamos viviendo hoy nos presenta la mayor y mejor oportunidad para pasar a una nueva etapa de la construcción de un nuevo modelo y es a lo que yo quiero convocar. Que nadie diga “A mí no me invitaron”. Yo, como jefe de Estado y como jefe de Gobierno, estoy invitando a todos los trabajadores, a los empresarios, a Venezuela, a esta nueva ofensiva de producción, de crecimiento, de abastecimiento, de satisfacción, de necesidades materiales, sociales y de precios estables, justos».

Dijo que era necesario combatir el contrabando, con los instrumentos legales adecuados: «Hay un problema gravísimo para el contrabando, que es la motivación económica (…). Es un mal gravísimo de la economía y de la sociedad. Ahora, ese no es un problema solo del gobierno. Nosotros hacemos todo, y más allá de todo, para garantizar que el contrabando no siga desangrando a Venezuela. Medidas de carácter político, medidas de carácter militar, medidas de carácter económico, pero es un tema (…) que golpea severamente a nuestra sociedad».

Dijo estar convencido de que en la ruptura con el rentismo, «del parasitismo, del dolarismo, del especulocionismo [sic] (…) como realización de la riqueza o de la ganancia, es necesario establecer mecanismos para la realización de los precios justos en toda la economía. Y yo pido en ustedes, en la gran mayoría de personas que se dedican a la economía, a la distribución, al comercio, a la producción, que nos pongamos de acuerdo en la aplicación de la ley de precios justos. Si hay que perfeccionar cosas de esta ley para que logre su objetivo (…), bienvenidas las propuestas».

Ante los presentes, el mandatario reveló: «Ya me he reunido con seis ministros y todavía no se toma ninguna decisión de lo que he planteado. Ese es un problema que tenemos: el tema de planificar. La agenda de decisiones, la toma de decisiones y la ejecución efectiva de las decisiones. Ese es un tema de verdad, de la gobernabilidad. Esa es la verdadera gobernabilidad, más allá de las teorías generales, filosóficas».

Pidió «desarrollar una metodología de trabajo que permita procesar en tiempo real los problemas y las decisiones que debemos tomar en cada uno de los campos de la ofensiva que estamos echando a andar, de la producción, del crecimiento económico, del abastecimiento del país y de los precios justos. Inmediatamente».

En ese ejercicio de autocrítica, el presidente añadió: «No tenemos justificación de algunos problemas que se acumulan, a veces por burocratismo, por desorden, por falta de prioridades, de seguimiento para que se ejecuten cosas elementales de las decisiones. A veces los recursos que no llegan. Tenemos que ir rompiendo esas barreras».

Anunció que a partir del lunes 28 de abril se desplegarán los ministros, viceministros y «todos los funcionarios vinculados a los temas del desarrollo económico a una gran jornada nacional de visitas e inspección de todas las industrias y empresas para poder diagnosticar los problemas y las soluciones inmediatas en el campo, in situ (…). Tenemos que ver cómo es el despliegue».

Aparte de lo anterior, el presidente dijo: «Pongo al servicio de este foro económico, de esta conferencia de paz (…), el fondo chino, Fonden y el fondo Mercosur y Alba, que contienen importantes recursos en divisas y en bolívares para dinamizar una nueva estrategia de inversión. Es imposible el crecimiento económico sin inversión».

Anunció, además, la liquidación «de hasta el 30% del financiamiento y administración pendientes de las divisas por sectores priorizados de lo que han llamado la joroba. Un mecanismo de financiamiento de estas deudas pendientes que permitan dinamizar, agilizar todos los procesos de importación. Sobre ese tema se ha trabajado bastante. Hay diversas propuestas. Debemos pasar a la fase de implementación (…), el reconocimiento y pago de este 30%. Y es parte del camino para solucionar y resolver todos estos asuntos».

Detalló que están por establecerse los mecanismos para la liquidación de ese porcentaje, pero recalcó: «Vamos entonces a proceder de manera inmediata, con mucha capacidad y agilidad, al reconocimiento y cancelación de este 30% como fórmula para avanzar en el resto de estos compromisos adquiridos».

Por otro lado, el mandatario convocó para el próximo lunes 28, en Maturín, Maracay y Maracaibo a «una jornada de trabajo de los 11 motores económicos en estas tres regiones, oriente, centro y occidente del país para ir aterrizando la metodología de trabajo. E, inclusive, para ir definiendo cómo sería la ofensiva en el campo productivo, que es uno de los campos más importantes».

Para la próxima semana quedaron convocados el sector automotriz, cauchos, baterías, repuestos, línea amarilla, entre otros, del Sicad I».

Firmó un Decreto para extender hasta el 31 de diciembre la excepción de los mecanismos y facilitación de trámites de importación en los sectores alimentos y salud. En específico, el decreto ampara la importación de alimentos y medicinas de primera necesidad, «insumos, materia prima para alimentos y medicinas, insumos para transporte terrestre de carga, productos para aseo del hogar, cuidado personal, material y equipo médico de diagnóstico descartable, equipo instrumental, implantes, prótesis,  etc».

El vicepresidente Jorge Arreaza explicó que había falta de sincronización entre muchos trámites: «Cuando tenías una solvencia, se te vencía la otra». Puntualizó que una condición para esta excepción es que se generen sistemas automatizados «para garantizar la mayor fluidez, eficiencia y celeridad de todos los procesos». Detalló que la intención no es «eliminar las solvencias ni los trámites, sino abrir este compás para acelerar en este momento la importación y, a partir de enero del año que viene, aspiramos tener un sistema sincronizado, eficiente, donde sea muy fácil y no haya colas ni intermediarios para lograr las solvencias y los certificados para importación».

Maduro sostuvo: «Tenemos que hacer un proceso de reingeniería de todos los procesos, trámites que tiene que llevar la economía venezolana para acceder a la divisa y proceder a traer a Venezuela las importaciones necesarias. Tenemos que simplificarlas, horizontalizarlas, y crear los mecanismos reales de controles previos y posteriores que garanticen que esas divisas que fluyen a través de los mecanismos existentes en efecto sean utilizadas como inversiones, sea para mecanismos diversos».

Otro punto abordado por el presidente fue la necesidad de reducir los trámites para exportar bienes: «No puede ser que el entramado de burocratismo, de trabas, pueda más a veces, como puede, que el intento por exportar y crear nuevas fuentes de divisas para el país. Hoy por hoy es así, tenemos que reconocerlo autocríticamente. Hoy por hoy, exportar desde Venezuela es la tarea más difícil que pueda asumir cualquier sector de la economía. Se lo hacen imposible. Es como un castigo: ¿Usted quiere importar? Tome; está castigado»

Maduro pidió, por otro lado, el pronto establecimiento del cronograma del plan de compras del Estado de todos los procesos productivos nacionales.

Asimismo, el presidente Maduro recordó que la superintendencia de precios justos establecerá para mañana —y desde su página web— «los mecanismos para anunciar y crear las normas de los precios justos que van a funcionar en la economía venezolana. Ya eso salió hoy en la Gaceta Oficial, la providencia administrativa formal que le da la potestad a la superintendencia de precios justos (…) para establecer los precios (…). Tenemos que ir a un proceso de regularización de los precios».

Acerca del sector automotriz, el presidente Maduro informó: «Luego de un proceso con todas las ensambladoras automotrices del país, se ha llegado al acuerdo para el establecimiento de los nuevos precios de los vehículos que se están comercializando en el mercado nacional».

El mandatario agregó que los acuerdos alcanzados con las ensambladoras no se limitan solamente al establecimiento de precios justos para los vehículos: «También nos hemos comprometido a resolver por la vía del Cencoex, del Sicad I, todas las necesidades que han presentado las ensambladoras, la industria automotriz venezolana para reposicionarse y rescatar su capacidad productiva nacional». En ese particular, el presidente detalló que para el domingo llegará a Venezuela el presidente de Toyota Internacional. Encargó al tren ministerial la tarea de anunciar los nuevos precios de los vehículos.

Acerca del funcionamiento de los centros comerciales, el presidente informó que el gobierno ha estado buscando un punto justo de equilibrio para que «funcionen de la mejor manera: con respeto al inquilino, precios justos, con respeto a los usuarios».

Maduro comentó que, una vez terminadas las conversaciones con los propietarios de centros comerciales y locales, emitiría por la vía Habilitante una ley «que regule el funcionamiento de estos centros comerciales y restablezca y resuelva los problemas que están allí».

Agregó que, luego de varias reuniones sesiones de trabajo, se encuentran cerca de una conclusión positiva. El ministro de Vivienda y Hábitat, Ricardo Molina, informó que se establecieron mesas de trabajo con los representantes de los centros comerciales a fin de alcanzar acuerdos en torno a los cánones de arrendamiento. De acuerdo con el ministro, ya se tiene un texto donde se contiene básicamente una metodología definida para determinar el valor base que luego se usa para determinar los cánones de arrendamiento.

El ministro reveló que se manejan tres opciones: la posibilidad de tener un canon de arrendamiento fijo, una metodología basada en los porcentajes de ventas de cada local («era una de las solicitudes de los propietarios de centros comerciales y de locales») y una tercera opción, que es una combinación de las dos anteriores. En esa propuesta, agregó el ministro, se fijan las condiciones claras y definidas para el proceso de desocupación o desalojo de los locales comerciales, «con respeto de las partes». Por último, quedan establecidas taxativamente las actividades prohibidas en la relación arrendaticia.

La propuesta contempla la creación de una comisión paritaria condominial, de modo que no sea solo el propietario del local quien defina las condiciones de operación del condominio sino que haya participación activa de parte de los inquilinos que hacen vida en el centro comercial. Esta propuesta conclusiva de las mesas de reunión será presentada al presidente en próximos días, dijo el ministro Molina, quien agregó: «Creo que tenemos allí, en el texto de esta ley, la demostración de que es posible llegar a acuerdos conjuntos, sabiendo sobre todo, que nosotros vamos camino a la construcción de la patria socialista».

Por otro lado, el presidente anunció que se crearán, por vía Habilitante, tres zonas  especiales que «van a ser tres motores que van a empujar, a mover la vida económica del país». Estas zonas serán: la Faja Petrolífera del Orinoco, el eje Carabobo – Puerto Cabello y el norte del estado Anzoátegui. Maduro especificó: «Queremos exponerlas, debatirlas, precisarlas y perfeccionar en su diseño para muy pronto, y de la mejor manera, activarlas. Tenemos la Ley Habilitante lista».

Este sería el último anuncio de la noche por parte del presidente Maduro, que dio fin así al establecimiento de la conferencia económica de paz