Cercados por el hampa - Runrun
A. Nieto Abr 11, 2014 | Actualizado hace 10 años

INSEGURIDAD

 

No estamos condenados a vivir en este clima de zozobra causado por la inseguridad

El asesinato de Gustavo Giménez Soucy y Luis Daniel Gómez, ocurrido el sábado de la semana pasada, mientras ambos paseaban con sus bicicletas en el parque nacional El Ávila, ratifica que los venezolanos cada vez estamos más cercados por la delincuencia. Pareciera que ya no existen sitios seguros en el país. Los antisociales siguen avanzando y ahora cometen crímenes en lugares en los que antes era impensable que ocurrieran.

En los últimos años la delincuencia ha incursionado en universidades (las recientes protestas se iniciaron precisamente por un intento de violación ocurrido en la ULA-Táchira), aeropuertos, liceos, preescolares, estadios, supermercados, estaciones del Metro, hospitales (asaltos a pacientes, médicos y enfermeras), hoteles, restaurantes y hasta en iglesias, entre otros lugares que hasta hace poco eran considerados insólitos o inusuales para el accionar criminal.

Varias son las causas que motivan el carácter desafiante e ilimitado de la delincuencia. La impunidad es una de ellas. Es conocido que hoy, como consecuencia de las graves fallas de las instituciones del sistema de justicia, aproximadamente el 98% de los crímenes que ocurren en el país quedan sin ningún castigo. La adicción a las drogas y al alcohol que padecen algunos delincuentes, también es un elemento que influye en esta realidad. Asimismo, nuestro brutal sistema carcelario, lejos de rehabilitar a los reclusos, en la mayoría de los casos los deshumaniza. Luego muchos salen a las calles con poco o ningún respeto por la vida de las demás personas.

Como el Estado no cumple con su deber de resguardar la integridad física y los bienes de los ciudadanos, el grueso de los venezolanos nos hemos visto en la necesidad de limitar nuestras actividades sociales. Evitamos acudir a algunos lugares y salir a ciertas horas. Esto ha traído como consecuencia una enorme pérdida en la calidad de vida de todos. Solo los que poseen vehículos blindados y varios escoltas, pueden andar medianamente tranquilos por las calles.

Los últimos sondeos de opinión señalan que la mayoría de los venezolanos ya ubicaron con claridad al culpable de esta situación. La encuestadora Datos indica que 50,1% de los ciudadanos responsabiliza al gobierno de Nicolás Maduro de la crisis de inseguridad personal en el país. La empresa IVAD también refleja que hoy el 51,8% de los venezolanos sencillamente no cree que este gobierno vaya a resolver nunca el tema de la delincuencia. Esto es comprensible, ya que Maduro ha aplicado varios planes sin ningún éxito. Constantemente les cambia el nombre, pero los resultados son los mismos. Hay que recordar que el combate contra la criminalidad fue su principal promesa en la campaña electoral, pero evidentemente no ha cumplido.

Los venezolanos no estamos condenados a vivir eternamente en este clima de zozobra causado por la inseguridad. Varios países y ciudades del mundo han conseguido revertir la situación de violencia desbordada que padecían. Cuando cambie el modelo político actual, estoy seguro que nosotros también lo lograremos.

Luis Izquiel

@luisizquiel 

El Universal