Regalado se murió por Francisco Ibarra Bravo - Runrun
Sendai Zea Nov 28, 2012 | Actualizado hace 11 años
Regalado se murió por Francisco Ibarra Bravo

Nos debe dar una gran tranquilidad tener un ministro de Planificación y Finanzas tan agudo como el que tenemos. En una de sus últimas declaraciones nos informó que los regalos se tienen que acabar. Ya no se puede esconder, poco a poco van abonando el terreno para lo que viene: la realidad económica a mordernos la pantorrilla.

Lo realmente curioso es que sea el mismo ministro que ha regido la política económica del país, durante largos años, el que nos venga a decir que los regalos se tienen que acabar. Resulta que es ahora, justo luego de las elecciones, que el ministro afirma que ya esta bueno de regalos y que la gente tiene que pagar las cosas. Esto es un gran progreso; finalmente el ministro ha entendido que el gobierno no puede regalar cosas como la gasolina o la electricidad indefinidamente. Lo interesante es sea precisamente ahora que ha dado cuenta que el precio de determinados servicios es sencillamente una burla. Nunca es tarde cuando la dicha es buena.

Hay un problema fundamental que todavía no ha entendido el ministro. La realidad es que regalado nunca se murió; no se puede morir quien nunca ha existido. Decir que regalado se murió, es equivalente a decir que el Ratón Pérez o el Conejo de Pascua se murieron. Regalado nunca existió porque nada es gratis. Lo que el gobierno le regala a algunos lo ha tomado de otros. El gran drama de la izquierda radical es que no ha entendido que el gobierno no genera riqueza. El gobierno puede generar condiciones para que los ciudadanos creen riqueza y tiene un rol importante que jugar; pero lo que el gobierno regala a unos se lo quita necesariamente a otros. Es curioso que el ministro se queje del precio de la gasolina cuando ha estado bajo su poder desde hace muchos años asignarle un precio justo y no lo ha hecho. La gasolina en Venezuela se viene regalando desde hace muchos años y ese regalo lo paga alguien. Lo peor es que en el caso del subsidio a la gasolina, los que la regalan son precisamente aquellos que no tienen carro, los mismos que deben aceptar un un transporte público  en condiciones lamentables. El dinero que el gobierno destina a subsidiar a la población con vehículo es dinero que no emplea para construir escuelas, otorgar salud, seguridad e inversión en infraestructura básica. Diversos estudios han estimado el subsidio a la gasolina está por el orden de US$ 12.000 millones. Esto es mucho más de lo que el actual gobierno dedica a la infraestructura vial. El regalo de la gasolina más barata del mundo tiene un origen y es precisamente ese origen el que hace este subsidio vergonzoso.

El ministro se ha topado con un verdadero problema. No sabemos si este ataque de lucidez será momentáneo o permanente. Lo que si sabemos es que una vez que se acepta que los regalos se tienen que acabar el problema es donde trazar la raya. Actualmente en Venezuela la lista de regalos es bastante abultada. Uno de los regalitos que tenemos por ahí rodando, y no son cuatro puyas, es el dólar a Bs 4,3. Éste, junto con el subsidio a la gasolina, son los mayores regalos existen en el país. No es casualidad que existan mafias dentro de los mismos organismos que dicen controlar estos dos bienes, y que sean estos mismos los que se encarguen de hacer el arbitraje. El problema del ministro Giordani, tan dado a abrir la boca para decir tonterías, es que en este caso no lo hizo. El ministro ha decidido abrir melones. Al parecer nada puede más contra una ingenua idea que la dura verdad de una restricción presupuestaria. Ya la música va dejando de sonar y las luces están prontas a encenderse. Se acabó la fiesta y regalado se murió. QEPD.

Francisco Ibarra Bravo

@franibar10