Pablo Sandoval desesperado por jugar con Magallanes - Runrun
Sandoval
Pablo Sandoval, con su cara siempre sonriente de “Panda” alborotado, me frenó en seco, apenas al saludarlo. Exigió…:
“Si vienes a entrevistarme, está bien, como siempre, estoy dispuesto. Ahora, para mí lo más importante es que hagas llegar un mensaje a mis amigos los magallaneros. Por favor, diles que estoy desesperado por jugar con Magallanes, y como aún no tengo aquí contrato para el año que viene, quizá me declare agente libre, por lo que nadie podrá prohibírmelo. Tiene que ocurrir algo muy grande para que no me uniforme de azul con el club de toda mi vida”. Todavía quería decir algo más…:
“Nada en este mundo del beisbol es más intenso, más emocionante, que jugar ante la multitud magallanera. Y si es contra el Caracas, entonces resulta la gloria”.
Acerca de su contrato para el futuro, los Gigantes, del cual se habla desde la primavera de este año, dijo: “Ah, bueno, yo sé de batear”, se disculpó, “de los negocios quien está enterado es mi agente”. El mismo Pablo hizo posible el encuentro con su agente, Gustavo Vásquez, quien explicó: “Pablo y yo hemos sido muy pacientes, porque la organización de los Gigantes lo merece, pero no se deciden. Quieren negociar con números mezquinos. Solo exigimos lo justo, de acuerdo como está el mercado”. Para la gente de Grandes Ligas, “el mercado” es qué tipo de bigleaguer está disponible, cuánto van a pagarle a tal pelotero en los próximos cinco o diez años, y si yo puedo compararme con él.
“No hay terceras bases de calidad en el mercado”, recalcó Vásquez, “Pablo es el único notable, no solo a la defensiva, sino también, como es público, notorio y conocido, a la ofensiva”. Le pedí a Gustavo Vásquez que me hablara de cifras en dólares, en años de servicio.
“Aspiramos un contrato para 10 años, por supuesto”, fue su rápida respuesta, “pero estamos dispuestos a negociar hasta por cinco, si es que el dinero es bueno”. ¿Y qué es dinero bueno para Pablo Sandoval y Gustavo Vásquez?
“Esperamos y merecemos no menos de 15 millones por año, si la negociación es para 10 temporadas. Ahora, si solo quieren cinco, pues tendríamos que hablar de alrededor de 20 millones”. El carabobeño celebró sus 28 años el 11 de  agosto, por lo que un contrato de 10 años lo llevaría hasta sus 38. Y sus mejores honorarios han sido los de esta campaña: 8 millones 250 mil dólares.

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