Más de 95.000 asistentes y 2.100 empresas expositoras en 400.000 metros cuadrados. En números fríos, esto es la Feria Mundial de Móviles (MWC, por sus siglas en inglés) de Barcelona (España), el mayor certamen de la industria de telecomunicaciones del mundo, en donde las grandes marcas presentan sus novedades en dispositivos, pero también se habla del futuro de las redes, la infraestructura y las regulaciones que impactan en este sector.
Este año, Samsung presentó su celular insignia, el Galaxy S7, y reforzó su apuesta por la realidad virtual, representada en las ya conocidas gafas Gear VR y con la nueva Gear 360, una cámara de doble lente que le permitirá a las personas y empresas crear y compartir masivamente contenidos multimedia aptos para realidad virtual.
LG asombró a los asistentes con su G5, un celular con una apuesta agresiva: ofrece la opción de volverse modular, al desprender su parte inferior, la cual al sacarla le permite al usuario ponerle componentes como una mayor batería, un control adicional para la cámara o ampliarle la potencia de audio con unos parlantes. También lanzó unas gafas de realidad virtual.
Sony, que también tiene unas gafas de VR, anunció además la gama de celulares Xperia X, tres modelos diferenciados entre sí por el ‘cerebro’ que integran: el mas potente, Xperia Performance; el Xperia X y el Xperia XA, con unas características de entrada, aunque todos con pantalla de 5 pulgadas y cámaras de 23 MP con el sistema de autofoco de las cámaras profesionales Alpha; y de 13 MP el de baja gama.
Huawei, por su parte, enfocó su presencia en el MWC alrededor de temas más estructurales: redes 5G, los nuevos sistemas de banda ancha móvil; el internet de las cosas y el futuro del negocio de las telecomunicaciones de cara a los operadores. Claro, no se alejó del show y presentó un portátil convertible (tableta y PC en uno) con Windows, de precio asequible.
Alcatel Onetouch también presentó su nueva gama de equipos Idol, en pantallas de 5,2 y 5,5 pulgadas. El Idol 4S y el Idol 4 también vienen acompañados de unas gafas de realidad virtual, procesadores de alta potencia y 3 GB de memoria RAM, lo que mejora el rendimiento del equipo.
Zuckerberg defiende que internet es un «derecho»
Defensa de internet. Anticipo de la tecnología de realidad virtual. Y crítica hacia la doble velocidad de internet. Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, quien desde hace tres años acude puntual a Barcelona, ha ido desvelando los detalles de su ambicioso y muy cuestionado plan: conectar el mundo.
Su comparecencia este año ha ido ligada a la misma temática que ya adelantó en la edición pasada: Internet.org, la plataforma con la que quiere ampliar el acceso libre a la Red en todo el mundo, incrementar su uso y dar a conocer el valor de internet como herramienta de trabajo. El debate sigue siendo el mismo: conectar el mundo no es fácil ni barato y precisamente las operadoras se quejan de la gran infraestructura que hay que destinar para conseguirlo.
«Hay 4.000 millones de personas que aún no tienen acceso a internet», ha recordado Zuckerberg en su conferencia en el MWC. Su objetivo es reducir esta cifra al máximo, así que entre los sus planes está lanzar un satélite sobre África este mismo año.
Plantas con energía solar y drones son otras de las herramientas que está desarrollando el creador de Facebook para extender internet. De hecho, trabaja ya en un avión solar para conectar el mundo. Según ha explicado Zuckerberg, este se impulsaría gracias a la energía solar y ofrecería red entre tres y seis meses.
Zuckerberg apuntó que la prioridad debería ser conectar el mundo y no crear «conexiones rápidas solo para los ricos». El modelo de negocio, según Zuckerberg, debe cambiar. «Mucha gente piensa que las empresas no se preocupan por nada más que hacer dinero», aseguró. El 5G debe ir más allá. «Está bien –puntualizó- pero primero hay que asegurarse que todo el mundo tenga acceso a internet». La industria, considera, no puede seguir creciendo a dos velocidades.
