La neutralidad de internet se encuentra en vilo. Se habla de que existe neutralidad en la red cuando todo el tráfico de internet es tratado por igual, sin restricciones por parte de operadores u organismos administrativos.
La polémica en este sentido se reanudó en Estados Unidos debido a una controvertida propuesta aprobada en mayo por el organismo regulador de telecomunicaciones de ese país. La propuesta, en resumen, plantea que la red se divida en dos carreteras: una de baja velocidad y otra de alta velocidad.
Acceder a la red de alta velocidad tendría un costo muy alto. Sería la red que usarían servicios de uso masivo como YouTube y Netflix. El problema es que si el precio para acceder a esas carreteras de alta velocidad es excesivo, se podría comprometer el futuro de algunos de los servicios web más populares en la actualidad.
Por fortuna, la propuesta no se ha concretado. En este momento, el organismo regulador se encuentra revisando las medidas planteadas y recogiendo sugerencias y comentarios. En 2015, veremos la definición de este capítulo trascendental para la web.
También será un año importante para las empresas chinas en internet. Este año Alibaba sorprendió al mundo al concretar la oferta pública inicial de acciones más exitosa de la historia de Wall Street. El próximo año podríamos ver a otras firmas chinas deslumbrando en la web.
Otro tema al que hay que poner atención será la moneda virtual bitcoin. Esta divisa digital cerró el año mal, pero Microsoft acabó de anunciar que permitirá su uso para pagar productos de algunas de sus tiendas en Estados Unidos. Este podría ser un espaldarazo que revitalice a las bitcoin.
¿Qué va a pasar con las tecnológicas?
La Unión Europea está cansada del dominio de Estados Unidos sobre internet. Se vendrán probablemente más medidas para limitar la expansión y el poder de las grandes empresas tecnológicas estadounidenses en Europa.
Hace poco, España dejó de aparecer en los resultados de Google News. ¿Por qué? Porque el gobierno español, amparado en la Ley de Propiedad Intelectual que se aprobó recientemente, le pedía a Google pagar a los medios españoles por su inclusión en las listas de noticias.
Para Google es inadmisible que tenga que pagarle a los medios españoles porque aparecen en un servicio gratuito. Además, no le resulta rentable.
No sería extraño que se vieran situaciones similares en el resto del Viejo Continente para 2015. También se prevé la creación de impuestos especiales para empresas como Amazon, Facebook, Google y Uber.
Europa quiere que las empresas tecnológicas de Estados Unidos paguen más por operar en su territorio y, además, quiere proteger la información de sus organizaciones y de sus ciudadanos. Iniciativas similares al polémico derecho al olvido podrían plantearse.
